¿Es esto lo que esperaba de mi vida?, ¿Cuál es el propósito de todo?, ¿Me he equivocado?, ¿Y si no estoy viviendo la vida que realmente quería vivir?. Estas son claras cuestiones que aparecen durante una crisis existencial, estados psicológicos que pueden generar una gran ansiedad. A continuación, te explicamos que son las crisis existenciales y cómo lidiar con ellas.
La crisis existencial es un punto de inflexión en la historia vital de una persona, que le lleva a sentir la necesidad de encontrar un sentido o propósito a su vida. Se trata de una búsqueda de identidad y sentido vital que conlleva diferentes síntomas psicológicos y emocionales y que puede llegar a ser muy estresante para las personas.
El problema de las crisis existenciales es que las respuestas a ciertas preguntas parecen poco claras. Esto genera un sentimiento de malestar que puede hacernos sentir que estamos completamente perdidos en un punto sin retorno...
Síntomas de la crisis existencial
El síntoma más notable de cualquier crisis existencial es la ansiedad, Aunque las crisis nos hacen desarrollarnos y crecer, a veces la confusión que nos causan nos sumergen en un bucle de preguntas y planteamientos sin respuesta que generan una fuerte frustración, así como pensamientos y emociones muy negativas. Esto puede acabar dando lugar a estados depresivos o ansiedad, además de otros síntomas como:
- Pérdida de interés en actividades que antes gustaban
- Sentimientos de tristeza y desesperanza
- Cansancio y fatiga
- Dolores de cabeza
- Dialogo interno
- Insomnio
- Mal humor
- Aislamiento
¿Consideras que las respuestas que da la ciencia (psicología) a la crisis existencial , es completa y queda solucionado el problema?
Siempre dependerá del tipo de crisis en la que el individuo esté sumergido. Si es existencial, la psicología no tiene la solución. El resto de ejemplos del artículo son crisis sociales, familiares, laborales, etc.
La crisis existencial requiere de una transformación absoluta del individuo para ser ¿superada? si y no, la crisis existencial real no se supera, se integra, se transciende y se convierte en compañera de viaje.
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